El temperamento de una persona forma parte de su carácter. Sin entrar en profundidades psicológicas complicadas, nuestro temperamento sería la forma en cómo interactuamos con el entorno, cómo nos adaptamos a él y sobre todo, cómo reaccionamos a este entorno. En el Zodiaco, el temperamento suele estar condicionado por el elemento al que pertenezcamos -Fuego, Tierra, Aire o Agua- y por las cualidades -Cardinal, Fijo o Mutable- en que también se dividen los signos.

Signos de Fuego: Aries, Leo y Sagitario

El temperamento de los signos de Fuego es el más conocido. Son personas enérgicas, apasionadas, impulsivas, y como tal van por la vida y reaccionan a las circunstancias del entorno y a las personas con las que se relacionan. La energía fluye a nivel mental y desde ahí los signos de Fuego se imponen de forma intensa. Su fuerte temperamento les hace ser peleones, intensos y vehementes.

El temperamento de Aries es el más sonoro de los tres signos de Fuego, quizás por representar al niño del Zodiaco. Hartos estamos de oír que Aries es muy temperamental. Y es cierto. Aries tiene temperamento y reacciona con temperamento. Fuerte e impulsivo. Con coraje y directo. El temperamento de Sagitario esconde una gran energía, que el arquero saca según le conviene, con una versatilidad a las circunstancias espectacular. Leo, por su parte, tiene un temperamento fuerte de inicio y obstinado en el tiempo, más difícil de calmar. Pero apasionado e impulsivo como el resto de sus compañeros de Fuego.

Signos de Tierra: Tauro, Virgo y Capricornio

Las personas de estos signos son seguras, prácticas, organizadas y prudentes. Y celosas y posesivas de lo suyo, ya sean personas o cosas. Su temperamento es firme y tranquilo, pero sobre todo es equilibrado. Son sensibles a lo que les rodea, pero reaccionan de forma moderada. Y a la hora de actuar, se toman su tiempo. Siempre razonando y siempre poniéndole algo de lógica a lo que sucede y a su reacción.

Los tres signos de Tierra son muy receptivos al entorno. Pero sacar su temperamento exige un esfuerzo físico por lo que necesitan que el objetivo esté muy claro. Su interior es fuerte y apasionado pero saben contenerse para sacar al exterior sólo lo que quieren. Tauro es el que más sorprende porque cuando deja salir su temperamento nadie se espera que con él pueda dejar en pañales al de Aries. Virgo tiene un temperamento que controla por el análisis previo que hace de todo y por su afán perfeccionista. Capricornio es pura cautela pero dentro esconde un volcán. Que controla perfectamente para que le sirva a lo que quiere. Y con su paciencia actúa siempre en el momento adecuado, ni más ni menos.Signos de Aire: Géminis, Libra y Acuario

El temperamento de los signos de Aire tiende al movimiento, como las personas de este elemento, de ahí que sea más variable pero también más flexible. Se podría definir este temperamento como nervioso y apático, pero al mismo tiempo racional e intuitivo.

Los Géminis, Libra y Acuario son nerviosos pero tranquilos al mismo tiempo. Por su temperamento nunca pierden los papeles, se enfadan relativamente poco y tienden a caer bien a todo el mundo. Están para los demás cuando hace falta pero pasan un poco de todo. Van a su rollo. No se podría decir que son temperamentales como tal. Lo cierto es que tienen un temperamento equilibrado para conseguir lo que quieren.

Géminis actúa con el entorno de forma muy intelectual. Libra con su buen gusto y Acuario con su talento. Los tres son muy intuitivos y sacan su temperamento según sienten que hace falta poner un poco de carne en el asador. Pero no lo dejan mucho tiempo expuesto. Vuelan de una cosa a otra y con ellos se lo llevan todo. Su temperamento y su forma de ser con la que profundizan en la vida lo que creen justo.

Signos de Agua: Cáncer, Escorpio y Piscis

En los signos de Agua la sensibilidad y los cambios de humor son característicos lo que da a estos signos un temperamento conectado directamente con sus emociones. Serán por ello sentimentales, melancólicos y con cierta tendencia al abatimiento. En su interior, estos signos lo perciben todo elevado a la máxima potencia pero reaccionan al entorno sintiendo más si cabe, y sacando fuera solo la parte de la que sientan más seguros.

Cáncer, Escorpio y Piscis se dejan querer más que buscar como locos a quien querer. Es por su temperamento emotivo pero con un fuerte sentido de la autoprotección. Es por los sueños que les rondan y por su temor a que no puedan hacerse realidad o a que se hagan realidad (cuando esconden un temor).

El ejemplo más representativo del temperamento melancólico de los signos de Agua es Cáncer. Escorpio también tendrá este tipo de temperamento pero la fuerza de otras características de su signo le hacen ser más guerrero con el entorno. Su temperamento es apasionado y altamente resistente a la circunstancias adversas. Por su parte, Piscis es quien tiene de los tres el temperamento más amable, pero también el más inestable.